“El Infierno no tiene límites, ni queda circunscrito a un solo lugar, porque el Infierno es aquí donde estamos y aquí donde es el Infierno tenemos que permanecer” El epígrafe de El lugar sin límites, sin dudas nos conduce a la historia, a los personajes que habitarán en este “lugar sin límites”, sin dudas es una metáfora que representa tanto la posibilidad de ir más allá de los límites impuestos por la historia y las tradiciones, como la necesidad de aceptar y confrontar esta historia para poder entender y encontrar el lugar en ella.